De todos es sabido que Almería no es un sitio fácil en el que montar un concierto. No porque no haya gente capaz de montar un evento en condiciones, nada más lejos de la realidad, sino porque el público almeriense es uno de los más imprevisibles del panorama nacional. Grupos de corte similar, unos aglutinan 10 personas mientras que otros llenan la sala. Incluso un mismo grupo, viene una vez y atrae a más de 100 personas y la siguiente aparecemos 12 en la sala, como pasó en el caso de Ellos. Con ese panorama, es comprensible que muchos artistas no se arriesguen a trasponer hasta este rincón de la Península Ibérica. Sigue leyendo
