Corría el mes de noviembre de 2020 cuando el que escribe estas líneas escuchó por primera vez un tema de Travis Birds. Tardó pocos segundos después de escucharlo en buscar su discografía para hacerse con ella. Remarcar que, por la situación sanitaria, se retrasó la producción del vinilo de Año X, y tras avisar por e-mail, a modo de compensación, nos enviaron a los compradores el formato CD con una tarjeta firmada por Travis Birds. Si ya nos había conquistado su música, con este gesto terminó de encandilarnos. Y es que, habiendo sufrido retrasos en otras ocasiones con otros artistas, y sin pandemia de por medio, es la primera vez que el retraso traía una compensación más allá de la disculpa por mail. Detalles a tener en cuenta.

Por eso, cuando en abril de 2021 resultó ser la protagonista de uno de los Secret Show de Crash Music, me frustró todavía más perdérmelo por estar atrevesando un bachecillo de salud que me tenía de baja. La siguiente vez que pasó por Almería, en noviembre de 2022, nos pilló fuera, en Baeza, en una de nuestras Cumbres Erizas, por lo que otra vez nos perdimos comprobar cómo sonaba en directo esa artista que nos había conquistado a primera escucha.

Eso sí, a la tercera fue la vencida y, por fin, conseguimos acudir a la cita con la madrileña en su paso por Berlín Social Club, así que podéis haceros una idea de la ilusión y las expectativas con las que acudimos al concierto. Esto podía haber sido un arma de doble filo, pero, «spoiler«, nuestras expectativas se superaron con creces.

Pasaban 12 minutos de las 11 de la noche cuando los músicos empezaron a salir a escena y ocupar posiciones acompañados de los aplausos del público, que casi llenaba la sala. Abrió la noche la trompeta de Tony Molina, a la que se fueron sumando Marcelo Fuentes al bajo, Marcus Wilson a la guitarra y Yoyo Bey a la batería. Con la melodía de «A veces sueño» ya sonando, Travis Birds hacía su aparición, vestida con un calzón de boxeo negro, andando lentamente hasta llegar al micrófono mientras el público la vitoreaba y aplaudía. Comenzó entonces a cantar el tema que también abre su último disco de estudio, Perro Deseo (Calaverita Records, 2023) y la mayoría de la sala siguió cantando y bailando al ritmo que marcaban la madrileña y sus músicos.

Terminado el tema, y mientras sonaban los aplausos, enlazó con «Cada minuto», siguiendo así el mismo orden del disco y, al finalizarlo, le trajeron un chupito, agua y una toalla oscura. Después de secarse el sudor como si estuviese en un ring, se colocó frente a Tony Molina y adoptó la posición en guardia como en un combate de boxeo.

Prosiguió entonces con «Madre Conciencia», cambiando así de disco a La costa de los mosquitos (Calaverita Records, 2021), el primer tema más lento de la noche y que sonó realmente bien, pero que quedó algo deslucido por alguna gente que no paraba de hablar y reír (¡Qué no se me vuelven a olvidar los tapones en un concierto, por favor!), haciendo incluso que el personal de la sala se acercase a llamarles la atención -desde aquí, gracias-.

Llegó entonces el momento de dar las buenas noches, brevemente con «Buenas noches, Almería, ¿Cómo estáis? Muy guapas, muy guapos, y yo diría que un poco peligrosos», lanzándose con «Peligro» y volviendo a conseguir un karaoke multitudinario de un público totalmente a su merced. Anecdótico fue el comienzo de «Perro deseo», pues se le olvidó enchufar la guitarra y cuando se dio cuenta, mientras sonreía comentaba «No pasa nada, siempre se puede volver a empezar». Como era de esperar, con el segundo comienzo ya fue todo fluido.

Volvió entonces a dirigirse a los presentes para comunicar que «Hoy es un día especial para nosotras, porque es el último día de la gira de salas. Esta canción se la quiero dedicar a todas las personas que están aquí esta noche y que piensen que no hay nadie al volante», dicho lo cual se lanzó con «Maggie 1983», la primera incursión del repertorio en su disco debut, Año X (autoeditado en 2016) y recibida con un atronador aplauso por parte del público. Parecía que la madrileña albergaba alguna duda y preguntó al público «¿Os está gustando el concierto?». La respuesta fue un sonoro sí, acompañado de gritos de guapa, silbidos y aplausos.

La noche siguió avanzado, compartiendo temas, principalmente de Perro Deseo, sonando por ejemplo «Oruga» y «Grillos», antes de la cual hicieron referencia al lluvioso día que habíamos tenido en Almería. «Pensábamos que no iba a llover en Almería, llamadnos ilusos» pero dejando claro la necesidad de agua decidieron «Vamos a hacerle una danza a la primavera, pero que sea lluviosa».

Tras «Maleza», se despidieron del público y abandonaron el escenario. Cierto es que se contaban ya 14 temas, pero quedaban algunos hits por sonar y el público todavía tenía energía y ganas de más, y así lo hizo saber con sus gritos. Como era de esperar, hubo bises. Para el primero de ellos, Travis Birds apareció sola sobre el escenario, «¿Qué os apetece? ¿Contamos la otra versión de la historia?» preguntó al público, y tras obtener una respuesta afirmativa, se lanzó con «19 días y 500 noches después», el tema que hizo junto a Benjamín Prado para el disco tributo a Sabina de 2019.

Terminado el tema, dio las gracias por la acogida y aprovechó «este momento de energía» para presentar a los músicos, que fueron saludando, hasta que Tony Molina tomó el micro para decir que era el cumpleaños de Travis Birds y comenzó a cantar junto con el público el cumpleaños feliz. Después, la madrileña aclaró que no era realmente su cumpleaños (¿broma de fin de gira?) «Pero siempre es bonito», tras lo cual siguió presentando a los músicos y al resto de los componentes del equipo como Kike Blay al sonido o Gusso de road manager.

Tras las presentaciones, se lanzó con uno de los hits que faltaban por sonar, «Eduardo», el tema que abría su primer disco. Un tema fresco, directo, con una letra que cuenta una historia que parece histriónica pero que es totalmente plausible, y que seguramente por eso conectó tanto con el público, convirtiéndola en el hit que en esa noche de sábado cantó el público almeriense a pleno pulmón.

La despedida definitiva vino con la dedicatoria a todas las chicas de «Thelma & Louise», el tema que cerró por todo lo alto una noche que guardaremos para el recuerdo. Ya que la gira de salas ha concluido, sólo podemos esperar que el destino permita que gocemos pronto de su directo en algún festival; nosotros repetiremos sin dudarlo en cuanto podamos.

Álbum de fotos

Travis Birds (Berlín Social Club, 09.03.2024)

1. A veces sueño
2. Cada minuto
3. Madre Conciencia
4. Peligro
5. Perro deseo
6. Maggie 1983
7. Urgente
8. Oruga
9. Grillos
10. Cuando Satán vino a verme
11. Una romántica
12. Mis aires
13. Coyotes
14. Maleza
15. 19 días y 500 noches después
16. Eduardo
17. Thelma & Louise