Hace dos años, antes de existir El Erizo Albino como tal, acudimos a nuestro primer B-Side Festival. La experiencia fue muy grata, tanto por el cartel como por el público, así que decidimos añadirlo a nuestra lista de favoritos. Sin embargo por estas fechas el trabajo no siempre nos permite suficiente libertad como para acudir a la cita, así que el año pasado nos quedamos con las ganas.Cuando este año tuvimos la certeza de poder acudir, la alegría fue doble al comprobar la composición del cartel (si no vamos no miramos los carteles, eso es ganas de sufrir sin necesidad). Volvíamos a ver a El Columpio Asesino -hacía ya un par de años que no los veíamos- y a Second, que estrenaban disco esa misma semana; además nos daba la oportunidad de volver a ver a Lori Meyers -siempre es un gustazo- y conocer nuevas propuestas como la de Who Made Who y Yall. Todo ello amenizado con grandes Djs entre actuación y actuación.
El día antes del festival estábamos un poco nerviosos viendo las previsiones meteorológicas, pero el 0% de probabilidad durante la tarde-noche nos animó a poner rumbo a Molina de Segura. Durante la tarde llovió algo; quizás por eso se retrasaran las pruebas de sonido y la apertura de puertas, pero quitando unas cuantas gotas a primera hora del festival, el tiempo dio un respiro y pudimos disfrutar de una gran noche.
Abriendo las sesiones, Vincent Deejay nos deleitó con una gran pinchada a base de grupos como Daft Punk, Miss Caffeina, Dorian, Izal… Después del calentamiento a cargo del Dj ya estábamos listos para comenzar a darlo todo con el primer grupo de la noche, los navarros El Columpio Asesino. Con su estilo personal y sus potentes guitarras se presentaron en el escenario del B-Side Festival para hacer un repaso a toda su discografía. Sonaron temas como “Floto”, “Dime que nunca lo has pensado” o “Un arpón de grillos”, pero la mayoría de público esperó a los temas más conocidos como “Toro” o “Perlas” -que sirvió de despedida en falso- para entregarse por completo a cantar y bailar con la banda. La verdadera despedida llegó con “Vamos” -una versión de Los Pixies- y la promesa de volver pronto por tierras murcianas.
Mientras cambiaban los instrumentos, Sergio Galian nos deleitó con remezclas de temas bien conocidos por la mayoría de los asistentes que nos hicieron bailar y que no decayese el ritmo. Cuando ya estuvo todo listo, los chicos de Second hicieron su aparición sobre las tablas del B-Side Festival ataviados con la indumentaria del primer videoclip de su nuevo disco Montaña Rusa -inspirada en clásicos como “La Fuga de Logan”-. Abrieron su actuación con “2502”, tema que corresponde con el videoclip y que también abre el disco, con gran acogida por el público en general y que lo cantó de principio a fin. Si bien se trataba del primer concierto -sin contar la presentación en Fnac- que hacía la banda tras la publicación de su nuevo largo, los murcianos optaron por adelantar sólo una parte del disco, manteniendo gran parte del repertorio de su última gira. Así, sonaron éxitos anteriores como “Psicopático” o “N.A.D.A.” alternadas con las incorporaciones “Caramelos envenenados”, “Las serpientes” y “La distancia no es velocidad por tiempo”. El concierto de Second fue un derroche de energía que nos hizo saltar, gritar, cantar y sudar de lo lindo; el público lo disfrutó de principio a fin y se notó. El broche final de su actuación lo pusieron con uno de nuestros temas favoritos, “Rodamos”.
El siguiente Dj en ponerse a los platos fue Ángel Carmona, el conocido locutor de Radio 3 que también se encargaba de las presentaciones de los grupos. Su sesión fue fresca y repartió simpatía con los presentes; se le veía disfrutar y nos hizo disfrutar a todos. Tras presentar a los chicos de Loja asegurando que éste era el año de Lori Meyers, la banda apareció en el escenario y abrió su concierto con “Luciérnagas y mariposas”. El ritmo de la actuación fue “in crescendo” con “Corazón elocuente” o “Impronta”; mantuvieron el tipo alternando temas de Impronta con otros del resto de su discografía, para luego comenzar otra vez la subida con la archiconocida “Luces de neón”. La actuación continuó y casi sin darnos cuenta ya estaban encarando su recta final, pero antes los de Loja se guardaban una sorpresa –sorpresa que habían repetido en otras citas-, la colaboración de Anni B Sweet en “El tiempo pasará”. Entonces empezó la apoteosis final a base de los temas preferidos del público como “Religión”, “¿Aha han vuelto?” enlazada con “Mi realidad”, “Emborracharme” y el petardazo final de la traca de la mano del himno -esto ya no es un tema más- “Alta Fidelidad”, alargado como en otras ocasiones repitiendo el estribillo en versión aflamencada. La solvencia
sobre el escenario de los de Granada está siempre más que asegurada y ofrecen un gran directo, sin embargo son humanos y no todas las noches pueden ser tan mágicas como la del B-Side.
Empapados en sudor, agotados, muertos de hambre y sedientos decidimos que había llegado el momento de acudir a por avituallamiento. Cuando volvimos a acercarnos al escenario, ya estaban Who Made Who haciendo bailar al personal que aún quedaba en el recinto -algunos ya se habían retirado-. Durante su participación sonaron temas propios como “TV Friend” y versiones como “Satisfaction” de Benny Benassi. Aunque estaba siendo un gran concierto con ritmos muy bailables, cuando comenzaron la despedida era ya un poco tarde y el cansancio hizo mella, así que pusimos rumbo al hotel con la sensación de haber vivido una gran noche que esperamos poder repetir el año próximo.