Poco más de 3 meses después de que saliese al mercado su disco de estudio más reciente, Extrapolaciones y dos preguntas (Warner, 2019), Fangoria acudía a Almería a presentarlo. Aunque el concierto, quinto de la gira, estaba incluido en la programación de primavera del Ayuntamiento de Almería, lo cierto es que no hubo un gran despliegue publicitario sobre el evento. Por eso, cuando llegamos a la Plaza de Toros teníamos algo de preocupación, sobre todo por tratarse de un día “de diario”, no fin de semana.
Sin embargo, nuestros miedos se mostraron infundados cuando, a las 22:15 de la noche, Alaska y Nacho Canut, acompañados de Rafa Spunky, Jesús Horror y un cuerpo de baile de 4 bailarines, iniciaron un concierto con un público que casi llenaba el aforo del recinto, que no es asunto baladí. Aunque lo cierto es que Fangoria siempre ha tenido buena respuesta en Almería, o al menos eso recordamos de citas anteriores, como la del Rafael Florido (2011) o el Recinto de Conciertos de la Feria (2016).
El tema elegido para romper el hielo fue “Espectacular”, uno de los más conocidos de su disco de 2017, Miscelánea de canciones para robótica avanzada (Warner). El público, totalmente entregado, dejó claro que venía dispuesto a darlo todo, a cantar y bailar con Fangoria como si no hubiera un mañana.
El repertorio siguió su curso combinando uno de los temas de la época de Alaska y Dinarama, “¿Cómo pudiste hacerme esto a mí?”, con “¿Qué sería de mí sin ti?”, tema de Carlos Berlanga reinterpretado por Fangoria en el disco que venían a presentar.
La noche prosiguió con esta fórmula de repertorio, alternado temas de toda su discografía con los más recientemente publicados. El resultado con todos ellos era el mismo, el público metido de lleno en el concierto y con un ambiente muy festivo.
Además de muy buenas canciones, los conciertos de Fangoria se caracterizan por ser un espectáculo donde se cuidan al detalle luces, proyecciones, coreografías y vestuario. En esta ocasión, la noche comenzaba con un telón rojo que se abría en la pantalla que ocupaba todo el fondo del escenario y que volvió a cerrarse tras el último tema. Entre ambos telones, se sucedieron animaciones con distintos motivos, desde flores, santos, figuras geométricas, … en función de cada tema.
En lo que respecta al vestuario, Alaska cambió dos veces de indumentaria, pero con una velocidad asombrosa, pues no abandonaba el escenario demasiado tiempo. Del negro con brillos inicial pasó al rojo y del rojo al morado oscuro, siempre con diseños muy fieles al estilo que suele lucir.
No vamos a hacer spoiler del repertorio completo, pero podemos decir que hubo varios momentos memorables, como la locución de Sara Montiel antes de “Absolutamente”, el montaje que acompaña a “¿De qué me culpas?” o el apoteósico final con el broche de oro de “Ni tu ni nadie” enlazado con “¿A quién le importa?”.
Seguro que mucha gente echó en falta algún tema, pero claro, dada la dilatada trayectoria y amplia discografía de Fangoria, construir el repertorio y contentar a todo el mundo no tiene que ser tarea sencilla. De las “extrapolaciones”, nos quedamos con el buen resultado que ofrece la combinación de “Historias de amor” con “Descongélate”, “Llorando por ti” o la que la propia Alaska presentó como “Una de las canciones más bonitas que se han compuesto”, “Dame estrellas o limones” de Family.
En resumen, la noche del jueves 16 de mayo pudimos disfrutar en Almería de un gran espectáculo, al que la única pega que se le puede poner es que ya podrían haber alargado 10 minutos más para redondear a las dos horas de duración; seguro que ninguno de los presentes se habría quejado por ello. Otra opción es que vuelvan a Cooltural Fest en 2020 con nuevo repertorio; por falta de temas no será.